Y os contaré, llevo tres años en paro, eso es pasado.
Me reinvente haciéndole a mi hija una bolsitas pintadas y unos broches para la familia, pues hacía la comunión.
Luego empecé hacerle camisetas y así me metí en este mundo de aguja, hilo y dedal.
Cuando una tiene que aprender hace, deshace y vuelta otra vez, pero creo que es la mejor enseñanza. He tenido personas a mi alrededor que me han enseñado hacerlo más fácil, o como cortar las telas, me encuentro feliz, haciendo esto, por eso no hay que venirse abajo, e intentar las cosas para crecer como persona, y abrir un futuro nuevo.
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